Quisiera hablaros sobre algo que llevo meses analizando, aprendiendo y experimentando en primera persona en Vietnam. Una reflexión sobre el éxito de la cultura asiática con la epidemia del Covid-19. Dirigida para todos y especialmente para esos países de occidente. Un artículo siempre con una visión e intención completamente constructiva.
En primer lugar, es importante comprender la realidad del país. Vietnam es un país de más de 90 millones de habitantes en vías de desarrollo. Su infraestructura y el sistema sanitario es frágil con lo que podría saturarse rápidamente y de forma devastadora. Esta es una realidad en la gran mayoría de países del Sudeste Asiático y, probablemente, sea uno de los principales factores que ha influido en tomar medidas más rápidas y estrictas.
Como ya sabéis Vietnam ha sido uno de los países con mejor éxito en controlar y contener la epidemia del maldito virus. Además, fue uno de los países que reactivó más rápidamente su economía. Incluso, de manera muy acertada, incentivó significativamente el turismo doméstico ayudando a que muchos de los negocios pudieran sobrevivir. En otro post me gustaría hablar más sobre esto.
Habiendo vivido el ciclo de la epidemia en estas tierras, he aprendido como los vietnamitas han mostrado siempre mucha seriedad y conciencia. Demostrando una gran responsabilidad al tomar todas las precauciones necesarias ayudando a que el virus no se acabara expandiendo. Después de casi un mes de confinamiento parcial en todo el país consiguieron disminuir y, en teoría, erradicar el virus.
Des del pasado mes de abril llevábamos casi 100 días sien nuevos contagios de transmisión local en Vietnam. La vida había vuelto por completo a la normalidad e incluso las medidas de distanciamiento social se habían casi terminado. De alguna manera la gente se había “olvidado” del virus.
Lamentablemente, en estos momentos, estamos viviendo un segundo rebrote en el país (principalmente en la zona de Danang). Por consecuencia el gobierno ha querido actuar rápidamente y nos volvemos a encontrar en estado de alarma y confinados. Aal igual que lo hizo en un principio siendo uno de los primeros países que cerraron fronteras a los chinos.
Os podéis imaginar lo duro que puede llegar a ser para la gente local volver a sufrir otro confinamiento y tener que cerrar de nuevo sus negocios (muchos de ellos probablemente de manera definitiva). Una realidad muy triste para todos pero que intentan afrontarla de manera positiva.
Lo que más me sigue impactando, por ese motivo escribo este pequeño reseña, es como los vietnamitas han vuelto a actuar de manera muy responsable. Des del primer nuevo contagio la gran mayoría decidió voluntariamente volver a ponerse la máscara. No fue necesario que nadie les pusiera normas y sanciones. Estas actuaciones demuestran una vez más el sentimiento de fragilidad humana y la conciencia social para el bien común. Algo que aún se preserva en Vietnam así como en muchas zonas del lejano oriente (especialmente en el Sudeste Asiático). Tailandia es otro gran ejemplo sobre lo que os comento.
Con esto no quiero menospreciar el esfuerzo de toda esa gente en países de occidente (actualmente con el mayor número de casos en el mundo) que vivieron un estricto confinamiento. Sin embargo, la diferencia más relevante que veo es algo instaurado en la cultura de la gente. Este escrito no tiene el objetivo de encontrar a los culpables. Sino de reflexionar e identificar aspectos socio-culturales que quizás puedan ayudarnos a mejorar.
Por poner un ejemplo, en España se empezaron a flexibilizar las medidas de confinamiento. La gente empezó a salir a la calle volviendo poco a poco a su rutina. Sin embargo, lo lamentable es que algunos (por supuesto no todos) decidieron no seguir tomando esas medidas de precaución. Como por ejemplo el uso de mascarilla, mantener distanciamiento social, etc. Por ese motivo los contagios se han visto incrementados. Finalmente ha sido necesario acudir a las sanciones por el incumplimiento de unas normas.
Desde mi profesión en el turismo y mi pasión por los viajes descubriendo descubrir nuevas tierras, he aprendido muchas cosas de otras culturas. No siempre deben ser mejor o peor pues cada una tiene su idiosincrasia. Pero de lo que sí estoy seguro es que es muy importante estar abierto para poder aprender de nuevos esquemas mentales y sociales.
En el caso de como afrontar una situación como la epidemia puede ser un buen ejemplo. No solo en el sentido macro-social y socio-político sino en esa parte más humana e individual . Por este motivo creo que es necesario reflexionar los porqués del éxito de la cultura asiática y Covid-19.
Eespero, aunque parte de la población ya lo ha hecho, que la gente tome conciencia y empiece a responsabilizarse de forma voluntaria. Al fin y al cabo, es todo para un bien común que acaba repercutiendo en el bienestar individual. Y no solo con la epidemia del covid-19 sino para muchas otras facetas y entornos de nuestra vida. Aunque lamentablemente este suceso sea un detonante para ello.
Solo me falta desear que la situación en Vietnam mejore muy pronto pues el esfuerzo de su gente se merece una recompensa. Esperemos que esta pesadilla termine pronto.
Una reflexión sobre el éxito de la cultura asiática y Covid-19 en la que os invitamos a compartir vuestra opinión.
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